jueves, 13 de enero de 2011

Internet en 100 años más.

Nuestros hijos y nietos nos conocerán por nuestro perfil. Nos verán en Facebook, Twitter en nuestras cuentas de cualquier sitio web con clave en Internet, cuentas de bancos, opiniones en diarios electrónicos, blogs, cuentas para encontrar amigos y parejas, en fin en todos aquellos perfiles, cuentas activas o que no hayamos cerrado.
Nos mostrará cómo escribíamos, acerca de qué, gustos, opiniones sobre aquellos hechos que marcaron los siguientes cien años. Así como sabemos hoy cómo vivían nuestros antepasados a consta del trabajo de arqueólogos, Internet sin demasiado esfuerzo nos enseñara claramente como vivíamos a comienzos del siglo XXI.
Qué decir de las fotos, videos, películas, material audiovisual que nunca pasarán a un museo pues podrán almacenarse solo en un minúsculo archivo portátil y al cual todos podrán acceder.
Porque Internet ya está absolutamente desarrollado y la conexión llega a todo el mundo. Pero es un fenómeno relativamente nuevo. En los últimos 10 años hubo un exponencial crecimiento de la red, nuevas funciones, dominios y todo cada vez más fácil, didáctico de usar por personas de todas las edades.
Internet será nuestro nuevo ADN, no existirán misterios acerca de nuestro origen reciente. Podrá revelarnos nuestra rutina diaria, horarios es que solíamos conectarnos y por supuesto el para qué ocupábamos la red. Nos despediremos de los álbumes familiares y será la red quien revelará nuestras principales costumbres de hoy.